tag:blogger.com,1999:blog-43059796215466198502024-03-19T08:57:58.259+00:00El Siglo futuroEl único medio de comunicación que analiza la actualidad con Criterio
<br>
<em>Ni se tuerce ni se quiebra. Sale cuando quiere, pero dice la verdad<em/></em></em>Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.comBlogger159125tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-10695344098372352062012-01-31T02:19:00.002+00:002012-01-31T02:19:28.175+00:00Torero"Yo soy toro en mi rodeo<br />
Y toraso en rodeo ageno;<br />
Siempre me tuve por güeno<br />
Y si me quieren probar<br />
Salgan otros a cantar<br />
Y veremos quien es menos".Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-66618475462688225892011-04-11T03:13:00.000+01:002011-04-11T03:13:39.582+01:00Morcillas a las coplas de La Corte de FaraónAl ir anoche para mi casa<br />
pasé señores el primer susto, <br />
pues como vivo en un tercero, <br />
el vigilante me dió un disgusto. <br />
Sacó la llave y una cerilla <br />
y, una vez dentro, me la encendió, <br />
más la cerilla era tan corta <br />
que al entresuelo no me llego....ay va!.........<br />
<br />
Juan y Maria fueron al campo, <br />
fueron al campo a merendar. <br />
Se sientan siempre bajo una higuera <br />
que muchos higos les suele dar. <br />
Ella le dice que quiere un higo, <br />
y el complaciente se le subió,<br />
más al bajarse resbaló, <br />
y todo el higo la espachurró....ay va!..............<br />
<br />
El que me apunta, desde allá dentro, <br />
hace un ratito que titubea, <br />
y al preguntarle lo que le pasa <br />
dice el muchacho que se marea, <br />
como le sigan los mareítos <br />
voy a tratarle con gran desdén, <br />
porque yo quiero que el que me apunte<br />
no se maree y apunte bien....ay va...!............<br />
<br />
Mucho agradezco vuestros aplausos, <br />
porque la gloria no hay quien discuta, <br />
pero el maestro me está diciendo <br />
que ya no puede con la batuta.<br />
Al clarinete se le va el aire,<br />
y sin pulmones está el flautin, <br />
y éste me dice: ¡por Dios, nenita!,<br />
que se me mueve hasta el cornetin....ay va...ay va....! <br />
<br />
(Marqués Moya, Esther)Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-67433850746972343402010-06-21T00:42:00.002+01:002010-06-21T00:42:46.912+01:00L'éventailJ'aime les éventails fanés<br />
Dont le lointain passé chagrine :<br />
Dans le tombeau de leur vitrine<br />
Ils dorment, les abandonnés !<br />
<br />
D'où viennent-ils ? Quelles mains blanches<br />
Les ont balancés, autrefois,<br />
Dans le tête-à-tête du bois<br />
Où le soleil dorait les branches ?<br />
<br />
Quels sont les doigts très effilés<br />
Qui les ouvraient, dites, grand'mères ?<br />
De quelles amours éphémères<br />
Ont-ils vu les chers défilés ?<br />
<br />
Combien de tendres confidences<br />
Ont-ils entendu, -doux secrets !<br />
Les vieux éventails sont discrets<br />
Au souvenir des contredanses,<br />
<br />
Où doucement, très doucement,<br />
Avec quelque nuance exquise<br />
Le marquis disait en ...mimant :<br />
« Ne veux-tu pas être marquise ? »<br />
<br />
Max Waller (1860-1889): « La Flûte à Siebel »Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-21476672701696662142009-04-11T17:37:00.002+00:002009-04-11T17:39:55.549+00:00EpigramaAl nombrar a Juan Merondes<br />cajero su principal<br />le dijo un día formal<br />"-Usted corre con los fondos".<br /><br />Juan la advertencia siguió<br />perfectamente cumpliendo<br />pues con los fondos corriendo<br />presto desapareció.Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com20tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-82901932064240097002009-04-11T17:30:00.003+00:002009-04-11T17:36:52.765+00:00El globo azulMiraba un niño asombrado<br />con expresión cariñosa<br />un globo de azul pintado<br />por un hilo sujetado<br />a su mano cuidadosa.<br /><br />El globo con lento vuelo<br />en el aire se mecía...<br />y el hermoso pequeñuelo<br />con infantil alegría<br />por verlo miraba al cielo.<br /><br />A pesar de su viveza<br />y su alegre desaliño<br />cierto sello de tristeza<br />marchitaba la pureza<br />de la sonrisa del niño.<br /><br />¡Ay! que cuando preguntaba<br />por su madre con amor<br />está en el cielo escuchaba<br />y en el cielo la buscaba<br />con inocente candor.<br /><br />Miraba el globo tranquilo<br />el niño con dulce arrobo<br />cuando rompiéndose el hilo<br />remontóse al cielo el globo<br />cual si en él buscase asilo.<br /><br />No produjo al tierno niño<br />pena llanto ni agonía<br />ver que el globo se perdía<br />antes bien en su semblante<br />se retrató la alegría.<br /><br />Y se dijo por consuelo<br />siguiendo su raudo vuelo<br />Ah que de prisa se va<br />Mejor cuando llegue al cielo<br />mi madre lo cogerá.<br /><br />CavestanyApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-89390073856402397742009-04-05T15:50:00.001+00:002009-04-05T15:50:45.103+00:00La vuelta de Martín Fierro408<br />Lo que pinta este pincel<br />ni el tiempo lo ha de borrar;<br />ninguno se ha de animar<br />a corregirme la plana;<br />no pinta quien tiene gana<br />sino quien sabe pintar.Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-4531953546019945842008-08-01T05:45:00.001+01:002008-08-01T05:45:31.317+01:00El escándalo de los eclesiásticos“... Pero tú hablas de «fe debilitada»... En última instancia, la fe es un acto de voluntad, inspirado por el amor. Nuestro amor puede enfriarse y nuestra voluntad deteriorarse por el espectáculo de las deficiencias, la locura, aun los pecados de la Iglesia y sus ministros; pero no creo que alguien que haya tenido fe alguna vez, retroceda más allá de su límite por estos motivos (menos que nadie, quien tenga algún conocimiento histórico).<br /><br />El «escándalo» a lo más es una ocasión de tentación, como la indecencia lo es de la lujuria (a la que no hace, sino que la despierta). Resulta convincente porque tiende a apartar los ojos de nosotros mismos y de nuestros propios defectos para encontrar un chivo expiatorio... La tentación de la «incredulidad» (que significa realmente el rechazo de Nuestro Señor y Sus Demandas) está siempre presente dentro de nosotros. Una parte nuestra anhela contar con una excusa para que salga al exterior. Cuanto más fuerte es la tentación interior, más pronta y gravemente nos «escandalizarán» los demás.<br /><br />Creo que soy tan sensible como tú (o cualquier otro cristiano) a los «escándalos», tanto del clero como de los laicos. He sufrido mucho en mi vida por causa de sacerdotes estúpidos, cansados, obnubilados y aun malvados; pero ahora sé lo bastante de mí como para ser consciente de que no debo abandonar la Iglesia (que para mí significaría abandonar la alianza con Nuestro Señor) por ninguno de estos motivos: debería abandonarla porque no creo o ya no creería aun cuando nunca hubiera conocido a nadie de las órdenes que no fuera sabio y santo a la vez. Negaría el Santísimo Sacramento, es decir: llamaría a Dios un fraude en su propia cara.<br /><br />Si Él fuera un fraude y los Evangelios, fraudulentos, es decir, episodios seleccionados con la mala intención de un loco megalómano (que es la única alternativa), en ese caso, por supuesto, el espectáculo exhibido por la Iglesia (en el sentido del clero) en la historia y en la actualidad, sería una simple prueba de un fraude gigantesco. Pero si no, este espectáculo es, ¡ay!, sólo lo que era de esperar: empezó antes de la primera Pascua y no afecta a la fe en absoluto, excepto en cuanto podemos y debemos estar muy apenados.<br /><br />Pero deberíamos apenarnos por Nuestro Señor, identificándonos con los escandalizadores, no los santos, sin clamar que no podemos «tolerar» a Judas Iscariote, o aun al absurdo y cobarde Simón Pedro o a las tontas mujeres como la madre de Santiago, que trató de poner a sus hijos por delante.<br /><br />Exige una fantástica voluntad de incredulidad suponer que Jesús nunca realmente «tuvo lugar», y más todavía suponer que nunca dijo las cosas que de Él se han registrado (tan incapaz era nadie en el mundo de aquella época de «inventarlas»): tales como «antes de que Abraham existiera Yo soy» (Juan VIII); «El que me ha visto, ha visto al Padre» (Juan IX); o la promulgación del Santísimo Sacramento en Juan VI: «El que ha comido mi carne y bebido mi sangre tiene vida eterna».<br /><br />Por tanto, o bien debemos creer en Él y en lo que dijo y atenernos a las consecuencias, o rechazarlo y atenernos a las consecuencias. Me es difícil creer que nadie que haya tomado la Comunión, aun una vez, cuando menos con la intención correcta, pueda nunca volver a rechazarle sin grave culpa. (Sin embargo, sólo Él conoce cada una de las almas singulares y sus circunstancias).<br /><br />La única cura para el debilitamiento de la fe es la Comunión. Aunque siempre es Él Mismo, perfecto y completo e inviolable, el Santísimo Sacramento no opera del todo y de una vez en ninguno de nosotros. Como el acto de Fe, debe ser continuo y acrecentarse por el ejercicio. La frecuencia tiene los más altos efectos. Siete veces a la semana resulta más nutritivo que siete veces con intervalos...<br /><br />A mí me convence el derecho de Pedro, y mirando el mundo a nuestro alrededor no parece haber muchas dudas (si el Cristianismo es verdad) acerca de cuál sea la Verdadera Iglesia, el templo del Espíritu, agónico pero vivo, corrupto pero sagrado, autorreformado y reestablecido.<br />Pero para mí esa Iglesia, de la cual el Papa es la cabeza reconocida sobre la tierra, tiene como principal reclamo el que sea la que siempre ha defendido (y defiende todavía) el Santísimo Sacramento, lo ha venerado en grado sumo y lo ha puesto (como Cristo evidentemente lo quiso) en primer lugar. Lo último que encomendó a san Pedro fue «alimenta a mis ovejas»; y como Sus palabras deben siempre entenderse literalmente, supongo que se refieren en primer término al Pan de la Vida. Fue en contra de esto que se lanzó la revolución del Oeste de Europa (o Reforma) -«la blasfema fábula de la Misa»- y la oposición entre las obras y la fe, un mero falso indicio...<br /><br />...Pero me enamoré del Santísimo Sacramento desde un principio...pero, ¡ay!, no he vivido a su altura. Ahora rezo por vosotros todos, sin descanso, para que el Curador (el Haelend, como el Salvador era por lo general llamado en el inglés antiguo) corrija mis defectos y ninguno de vostros deje de nunca exclamar: Benedictus qui venit in nómine Dómini!”<br /><br />Es una carta de J.R.R. Tolkien a su hijo Michael, 1 de Noviembre de 1963(cfr. J.R.R.Tolkien Cartas, selección de Humphrey Carpenter; carta 250, pp. 393-96. Minotauro, Barcelona 1993).Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-41812444284894410272008-07-29T01:10:00.003+01:002009-04-05T16:00:40.976+00:00Más satíricasAl general Pavía<br /><br />Tuvo un dia una idea, y todavía<br />asombrado, recuarda su proeza,<br />pues gracias al vapor de la cerveza<br />fue Cromwell en España todo un día.<br /><br />¿Qué fin trascendental se proponía?<br />Él mismo no lo supo con certeza;<br />se jugó aquella noche la cabeza,<br />creyéndose, quizás, que la tenía<br /><br /><br />Doña Tecla, la de Yecla,<br />es tecla muy singular.<br />¿Para qué sirve una tecla<br />que no se deja tocar?<br />(Bretón de los Herreros)<br /><br /><br />La niña que a dos encela<br />no es tonta, que es atrevida.<br />Si se le apaga una vela,<br />otra le queda encendida.<br /><br /><br />Un pájaro se murió<br />en el patio de un convento,<br />y las monjitas lloraron<br />con el pajarito dentro.<br /><br />Pregunté a un niño: -¿Café<br />es género masculino?<br />Y el niño, de buena fe,<br />contestó: -No, ultramarino<br /><br /><br />Cuando a las bellas amoroso miro,<br />sus pesares disipo y sus enojos,<br />y en su rubor conozco, y en sus ojos<br />la violenta pasión que les inspiro.<br /><br />Cuando alguna sonrisa, algún suspiro<br />tímido exhalan de sus labios rojos,<br />claro me están poniendo sus sonrojos<br />que soy el blanco de tan dulce tiro.<br /><br />No hay belleza que mire impunemente<br />mi semblante perfecto y talle airoso;<br />todas humillan su orgullosa frente<br /><br />rindiéndose a mi encanto poderoso.<br />Pues ni en la edad pasada ni presente<br />ha habido un hombre como yo, de hermoso.<br />(Afán de Rivera)<br /><br />He visto mujeres vanas,<br />manirrotas, miserables,<br />celosas, inaguantables,<br />pedigüeñas y holgazanas.<br />Soberbias, que a todas horas<br />arman la de Dios es Cristo;<br />hembras frágiles he visto,<br />cotillas murmuradoras,<br />solteras de Belcebú,<br />casadas con Lucifer...<br />¡Pero nunca a una mujer<br />que hable tano como tú<br /><br />(Rafael Castellanos)<br /><br />Sedujo Luis a Pascuala,<br />la esposa de un general,<br />y éste le metió una bala<br />junto a la espina dorsal,<br />que siempre ha salido mal<br />un toque de generala<br /><br />(Martínez de la Rosa)<br /><br />Un joven naturalista<br />pidió la mano de Inés.<br />La madre, que era muy lista,<br />preguntó con interés:<br />¿Sus padres tienen auríferos?<br />¿De qué familia es usted?<br />Y él dijo con mucha fe:<br />Señora, de los mamíferos<br />(Martínez de la Rosa)<br /><br />Mas, al festivo ingenio deba sólo<br />el sutil epigrama su agudeza.<br />Un leve pensamiento, una voz, un suspiro le bastan<br />para lucir su gracia y su viveza.<br />Y cual rápida abeja, vuela, hiere,<br />clava el fino aguijón, y al punto muere.<br />(Martínez de la Rosa)<br /><br />Delante de personas de copete<br />no te rasques la zona del paquete.<br /><br />El puente tiene tres ojos,<br />yo tengo dos solamente,<br />pero si cuento el del culo,<br />tengo los mismos que el puente.<br /><br />Los dedos de las manos,<br />los dedos de los pies,<br />la polla y los cojones,<br />suman veintitrés.<br /><br /><br />Señor conde, dígame:<br />¿De qué sirve, señor conde,<br />el que yo tenga por dónde<br />si usted no tiene con qué?<br />(Juan Valera)<br /><br />Si en el sexto no hay perdón<br />ni en el noveno rebaja,<br />ya puede el Señor llenar el Paraíso de paja.<br /><br />A los pies de un devoto franciscano<br />acudió un penitente. Diga, hermano:<br />¿Qué oficio tiene? Padre, sombrerero.<br />¿Y qué estado? Soltero<br />Y ¿cuál es su pecado dominante?<br />Visitar a una moza. ¿Con qué frecuencia?<br />Padre mío, bastante.<br />¿Cada mes? Mucho más ¿Cada semana?<br />Aún más todavía más. ¿La cotidiana?<br />Hago dos mil propósitos sinceros...<br />Pero dígame, hermano claramente.<br />¿Dos veces cada día? Justamente<br />Y ¿cuándo coño hace los sombreros?<br />(Samaniego)<br /><br />Al cura de Villarejo <br />de Salvanés.<br />le llegan los cojones<br />hasta los pies.<br /><br />A Serraño Súñer<br /><br />Este siniestro adolescente cano<br />que de cuñado cínico blasona,<br />a un memo con fajín dio una corona<br />para moverla con oculta mano.<br /><br />En la Guerra civil no expuso nada;<br />al Gobierno llegó por matrimonio,<br />explotó su amistad con José-Antonio,<br />y lo canjeó, cobarde, una embajada.<br /><br />Enfermo del estómago aún delira,<br />pues cubrir su cedismo es vil patraña.<br />Todos le adulan, pero a nadie engaña,<br />cuando levanta el brazo con mentira,<br />con su camisa azul que odio le inspira<br />su débil brazo castrador de España.<br />(Foxá)<br /><br />Tú, que naciste en las porteñas hampas<br />y del amor conoces los oficios,<br />oh, vieja zorra de las anchas pampas<br />que enamoras marqueses pontificios.<br /><br />Tú, que cantas esos tangos con ojeras<br />repletos de memeces argentinas,<br />y hablando con duquesas tortilleras<br />confundes las Meninas con mininas.<br /><br />Los prognatas toreros que complicas<br />por ti se tornan en babosos toros.<br />Vas al flamenco con señoras ricas,<br /><br />y estrenas obras con cretinos coros<br />escritas para ti por los maricas<br />que sueñan con los culos de los moros.<br />(Foxá)<br /><br />Cuando paso por tu puerta,<br />tu madre me llama feo.<br />Si me lo vuelve a llamar,<br />saco la picha y la meo.<br /><br />Eras ente en potencia, y ya el Destino,<br />crismando los testículos paternos,<br />puso una inmensa sucesión de cuernos<br />en quien contigo hiciera su camino.<br /><br />No sabías leer, y de continuo<br />a tu clítoris iban sempiternos,<br />todos los dedos, los primeros yernos<br />que dio a tu madre tu caliente sino.<br /><br />Llamarte fresca pobre sonaría;<br />llamarte zorra, no daría tu talla<br />pues por puta te tienen las personas.<br /><br />Y llamarte putísima sería<br />como llamarle cerro al Himalaya,<br />como llamarle arroyo al Amazonas.<br /><br />(Pérez Creus)<br /><br />A Manolito el pollero<br /><br />Aquí donde usted me ve<br />soy Manolito el pollero,<br />el único vate que<br />de la pluma hace dinero.<br /><br />A María Antonia Ibarra<br /><br />Mujer, ¿por qué no descubres<br />que el verso no es tu camino?<br />Si apaluden tu destino<br />es porque tiene dos ubres<br />como la copa de un pino.<br />(Pérez Creus)<br /><br />A Manuel Benítez Carrasco<br />Es un poeta folclórico<br />que no se lo salta un galgo.<br />Sabe manejar el tópico,<br />y dice Laín Entralgo<br />que es bastante maricónico.<br />(Pérez Creus)<br /><br />Buero Vallejo es auto<br />de una comedia cimera,<br />"Historia de una escalera"<br />que le sirvió de ascensor.<br /><br />A Salvador Pérez Valiente<br />Fue con los rojos teniente<br />y con los fachas alférez.<br />Con los primeros fue Pérez,<br />con los segundos, Valiente.<br /><br />Cuando con los otros niños<br />en Belén jugabas Tú,<br />¿sabías ó no sabías<br />que eras el Niño Jesús<br /><br />Al pasar junto a la charca<br />el niño me preguntaba:<br />¿Qué son las ranas?<br />Pues mira niños las ranas...<br />¿Y por qué cantan?<br />Pies mira niño las ranas...<br />¿Y por ué saltan?<br />Pues mira niño, las ranas...<br />¿Y por qué nadan?<br />¡Y no yuve más remedio<br />que tirar al niño al agua!<br /><br />Si el hombre quiero imperfecto,<br />la perfección alcanzar,<br />el buen camino es el recto<br />¡y por él debe tomar!<br />(Manuel Verdugo)<br /><br />A Nicolás González Ruiz<br />Aqí yace William Shakespeare<br />en otro tiempo inmortal,<br />Murió de una traducción <br /><br />A Juan de Garay<br />Para fundar Santa Fe<br />Juan de Garay se embarcó.<br />Llegó, la fundó y se fue.<br />¡La madre que lo parió!<br /><br />La madre quería casarla,<br />la niña quería un marqués,<br />el marqués quería dinero...<br />y están contentos los tres<br />del cabrón de nicolásApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-88529500163640666652008-06-21T23:44:00.000+01:002009-06-21T23:45:33.741+01:00OratioProtector in te sperantium Deus, sine quo nihil est validum, nihil sanctum: multiplica super nos misericordiam tuam; ut, te rectore, te duce, sic transeamus per bona temporalia, ut non amittamus aeternaApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-36539304156008071162008-04-28T02:46:00.003+00:002008-04-30T20:33:47.938+00:00Luisa Fernanda(A la duquesa Carolina):<br /><br />Para usté la vida es bella<br />mirada desde su altura;<br />pero ¡qué triste y qué dura<br />cuando hay que luchar por ella!<br /><br />¿Riquezas? Las que heredó<br />¿Alegría? La que pide<br />¿Rango? Su boca lo mide<br />¿Amores? ¡Los que compró!<br /><br />Las diversiones, logradas,<br />y los caprichos, colmados;<br />y, para los desgraciados,<br />unas piadosas miradas.<br /><br />Venga un orden diferente.<br />¿Mejor ó peor? No sé;<br />pero donde yo... y usté<br />nos veamos frente a frente.<br /><br />Ni más baja ni más alta:<br />al nivel del corazón,<br />que, con la misma emoción,<br />lo mismo palpita y salta.<br /><br />Mas lo que no puede ser<br />es que usté tenga derecho<br />a las ansias que en su pecho<br />haya sentido nacer,<br /><br />y, además, por el placer<br />de abrumar con su grandeza,<br />¡a ensombrecer de tristeza<br />los ojos de otra mujer!<br /><br />(Acto segundo, cuadro tercero)Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-24214325882381932302008-04-25T00:27:00.007+00:002008-05-02T01:20:00.891+00:00Curas aborteros, putas para todosMe han sido dados a conocer -no por revelaciones místicas, sino porque tantos años vagando por estos mundos de Dios le permiten a uno encontrarse con infinidad de culturas y de religiones, de personas maravillosas y de fascinantes criminales- algunos de los trabajos de la masonería (a la cual yo protesto que no pertenezco, para sosiego de los meapilas) y en consecuencia he tratado con algunos hermanos masones. No he encontrado a ninguno tan vil como este párroco de la Archidiócesis de Barcelona que ha apoyado y financiado abortos. No me importa casi nada que los curas sean vagos, chaperos ó ignorantes, mientras de vez en cuando abrán las iglesias para soltarles un mitin a cuatro desgraciados que, después de todo lo que ha caído, aún tengan ganas de escuchar esos rollos.<br /><br />Pero las jerarquías eclesiásticas españolas están obsesionadas en la lucha política contra el gobierno de Rodríguez Zapatero: no quieren perder las clases de religión y no quieren que se instaure la Educación para la ciudadanía. A mi no me preocupa el tema especialmente, porque los profesores de religión -salvo honrosas excepciones- no son mejores que el cura abortero. Todos los que desertaron sindicatos de clase, iglesias, órdenes y monasterios, porque ya no creían ó porque tiraba más una moza fea que dos carretas, son quienes enseñan sin cultura y sin fe en las escuelas enchufados por los obispos, a cambio de unos emolumentos a los que todos tenemos que subvenir.Y en las parroquias tenemos una serie de curas que hace ya años que perdieron la fe y dejaron de leer algo que no fuese el periódico, que son más letales para la fe que toda la Educación para la ciudadanía. Si se hacen unas oposiciones mínimamente limpias para profesorar en Educación de la ciudadanía, quizá algunos profesores crean en los derechos humanos y enseñen el aborto como el crimen más abominable que pueda ser cometido por un hombre contra otro. Si los fieles van a la iglesia, no es probable que escuchen nada sensato.<br /><br />Es evidente que el cura está excolmulgado, pues procuró que se realizase el homicidio del niño en el vientre de la madre. Lo más terrible es que es solamente un cura el que se ha atrevido a decir esto en público, pero la realidad es que existen muchos más que hace ya muchos años que dejaron de ser católicos y siguen en el puesto porque para arar son viejos y de luces andan escasos. Además de criminales contra la vida del recién nacido, lo son contra la fe de sus parroquianos. ¿Y a Vd. cree que a mi me importa un huevo que nadie marque el 0.7 en la casilla de recaudación de la Iglesia? Para estar a favor de la vida no es preciso ser católico: lo son ateos, protestantes, musulmanes,... pero para ser católico hay que ser antiabortista y para ser párroco no hay que estar excomulgado. Y si alguien se enorgullece de sostener un aborto -además, ilegal- no sólo hace ya mucho que ha dejado de ser católico, sino que es también un miserable estafador. Y los obispos -vigilantes sólo al plato de lentejas- tendrían que corregir esa situación para que la sangre de los inocentes no manche gota a gota sus manos, porque por muchas quirotecas que usen será muy difícil limpiarla antes del Juicio final. Estoy pensando en crear un puticlub que se llame "La casa del Edén" y no creo que nadie vaya a tener la falta de caridad de meterse contra el amor fraterno, porque si un cura puede procurar un aborto, es que ya vale tudo.Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-9935125865128470082008-04-20T19:26:00.002+00:002008-04-25T15:00:49.522+00:00La tierra de la verdadCinco palabras que resumen<br />todo un ingenuo y noble afán.<br />En el desfile luminoso,<br />en la parada militar.<br />Niños mujeres, a codazos.<br />¡Vamos a ver al General!<br /><br />Esta es España: ésta es la tierra<br />de la exactísima verdad.<br />Tierra del bulto y los perfiles,<br />de las palmeras sobre el mar.<br />Todo, las ansias y sueños<br />y la emoción y el ideal<br />ha de tener fisonomía<br />y exactitud y realidad.<br />Nuestro Dios tiene sangre a chorros<br />y cabellera de verdad.<br />Nuestra María Dolorosa,<br />llanto de cera y cristal.<br />Y nuestra guerra y nuestro sueño,<br />nuestra epopeya y nuestro afán,<br />tiene una cara conocida<br />y una sonrisa popular.<br /><br />Hermanos todos españoles,<br />los de la gran curiosidad,<br />los de los pasos y los “cristos”<br />y las “marías” de verdad.<br />Estas no son vagas ideas<br />ni éstos son sueños sin cuajar.<br />Estos son rostros, marcas, pechos,<br /><br />¡Estos son hombres de verdad!<br />¡Los forjadores de un Imperio!<br />¡La encarnación de un ideal!<br /><br />Rafael Holgado Chamizo-CidonchaApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-11994879698176138662008-04-17T01:19:00.000+00:002008-04-27T01:41:24.027+00:00Autoinmolación del Consejo de EuropaEl Consejo de Europa no se puede decir que sea un grupo de tipos que viven del presupuesto público sin pegar golpe, porque lo acaban de pegar, un golpe mortal.<br />Por gran mayoría ha decidido emitir una recomendación a todos los países para que tutelen el "derecho al aborto". Es decir han decidido que los gobiernos tienen que facilitar el que pueda asesinarse al niño en el vientre de la madre. Habrá quien se alegre de tal noticia, con la esperanza de que pronto se apruebe también el derecho a matar a los negros y a los judíos (y quizá incluso a los mendigos), a pegar a las mujeres, a acostarse con las propias hijas, a comprar niños en India para violarlos a placer y después poder torturarlos y matarlos mientras se graba en Internet y con un poco de suerte hasta podrán cobrar algo de subvención por tales películas. El mundo se está haciendo decididamente más humano y, a medida que los fanatismos retroceden, la libertad se va abriendo paso. El problema es que la libertad para uno supone una carga para otro. Si yo tengo derecho a abortar y el Estado me lo tiene que garantizar, el niño tiene el deber de morir para que yo me quede completamente satisfecho con mi derecho. Si el niño no muriese, pues habría que dejarlo sin respiración ó sin alimento hasta que cumpla con su obligación, porque según las últimas novedades de la legislación española no se le puede pegar una bofetada. Y es que es esta la ley del mundo: el león tiene derecho a comer y la oveja la obligación de dejarse deglutir. Igual que el atracador tiene derecho a atracarnos y nosotros obligación de entregarle lo que buenamente disponga y quizá habría que darle las gracias por no haber deseado también disponer de nuestra vida. <br />A partir de muy pronto cuando un macho fuerte decida que quiere violar a una moza, pues ésta tendrá que colaborar con lo que se le pida, pues el fuerte está en su derecho. Todo bien. Así ha ocurrido siempre en la historia de la Humanidad. Y es justo que ahora los gobiernos den un concreto respaldo jurídico a quienes deciden asesinar al prójimo.<br />Sin embargo, cabría preguntar a los conglomerados de células que han adoptado la forma de miembros de esta noble cámara, ¿qué ocurriría si un chico joven decidiese pegarles una paliza porque quieren el coche oficial de que los prebostes gozan? ¿ó si algún grupo terrorista anarquista decidiese que esta clase de parásitos son un impedimento al mundo libre? ¿Y si sus propios hijos están hartos de que siendo ya demasiado viejos, estén fastidiando todo el día y deciden darles una inyección definitiva? El problema lo tendrán los ahora despenalizadores del asesinato en el vientre de la madre, porque al haber destruido cualquier límite moral, no les va a quedar ningún argumento para justificar que ellos sí tienen derecho a la vida.Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-55690744897866884232008-01-25T15:30:00.000+00:002008-01-25T15:40:20.004+00:00El problema del mundoAl final todo se reduce a un problema de desorden:<br />Lo creado por encima del Creador, el sujeto por encima de la realidad, el sentimiento por encima de la razón, la cantidad por encima de la calidad, el deseo por encima del deber, el placer por encima del deber, Es el non serviam: el no querer colocar las cosas en la jerarquía que naturalmente le corresponde. Y a eso lo podemos llamar pecado, desobediencia, subjetivismo, sentimentalismo, vitalismo, existencialismo, liberalismo, relativismo, ... pero todo tiene la misma raíz, la no aceptación de la realidad. El hombre quiere crear la realidad, la verdad, la moralidad,... y siempre se estrellará contra los hechos. No quiere estar bajo normas que no se dicte a él mismo, pero si son subjetivas es cuando no valen nada. El hombre es un ser desordenado: prefiere bienes inferiores a los superiores. Se prefiere a él mismo.Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-17236186813919114172008-01-21T02:22:00.000+00:002008-01-21T02:30:56.635+00:00Quien libre estáQuien libre está, no viva descuidado,<br />que en un instante puede estar cautivo,<br />y el corazón helado y mas esquivo<br />tema de estar en llamas abrasado.<br /><br /> Con la alma del soberbio y elevado<br />tan áspero es Amor y vengativo,<br />que quién si él presume de estar vivo,<br />por él con muerte queda atormentado.<br /><br /> Amor, que a ser cautivo me condenas,<br />Amor, que enciendes fuegos tan mortales,<br />tú que mi vida afliges y maltratas: <br /> <br /> maldigo desde ahora tus cadenas,<br />tus llamas y tus flechas, con las cuales<br />me prendes, me consumes, y me matas.<br /><br />Gaspar Gil PoloApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-2339294679992391612008-01-21T02:17:00.001+00:002008-01-22T02:21:54.335+00:00Cuando me paro a contemplar mi vidaCuando me paro a contemplar mi vida<br />Y echo los ojos con mi pensamiento<br />A ver los lasos miembros sin aliento<br />Y la robusta edad enflaquecida,<br /><br />Y aquella juventud rica y florida<br />Cual llama de candela en presto viento,<br />Batida con tan recio movimiento<br />Que a pique estuvo ya de ser perdida,<br /><br />Condeno de mi vida la tibieza<br />Y el grande desconcierto en que he andado<br />Que a tal peligro puesto me tuvieron.<br /><br />Y con velocidad y ligereza<br />Determino de huir de aqueste estado<br />Do mis continuas culpas me pusieron.<br /><br />Fray Luis de LeónApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-86425266701885789292008-01-21T02:16:00.001+00:002008-01-25T02:03:36.046+00:00En la prisión-Al salir de la cárcelAquí la envidia y mentira<br />me tuvieron encerrado.<br />Dichoso el humilde estado<br />del sabio que se retira<br /><br />de aqueste mundo malvado,<br />y con pobre mesa y casa,<br />en el campo deleitoso<br /><br />con sólo Dios se compasa,<br />y a solas su vida pasa,<br />ni envidiado ni envidioso.<br /><br />Fray Luis de LeónApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-70181682860503139562008-01-21T02:14:00.002+00:002008-01-25T02:08:46.029+00:00El firme amorMiré, señora, la ideal belleza,<br />guiándome el amor por vagarosas<br />sendas de nueve cielos,<br />y absorto en su grandeza,<br />las ejemplares formas de las cosas<br />bajé a mirar en los humanos velos,<br />y en la vuestra sensible<br />contemplé la divina inteligible.<br /><br />Y viendo que conforma<br />tanto el retrato a su primera forma,<br />amé vuestra hermosura,<br />imagen de su luz divina y pura,<br />haciendo, cuando os veo,<br />que pueda la razón más que el deseo.<br />Y pues por ella sola me gobierno,<br />amor, que todo es alma, será eterno.<br /><br />Lope de VegaApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-82682544695518137722008-01-21T02:14:00.001+00:002008-01-21T02:31:34.143+00:00Véante mis ojosVéante mis ojos,<br />dulce Jesús bueno;<br />véante mis ojos,<br />muérame yo luego.<br /><br />Vea quién quisiere<br />rosas y jazmines,<br />que si yo te viere,<br />veré mil jardines,<br />flor de serafines;<br />Jesús Nazareno,<br />véante mis ojos,<br />muérame yo luego.<br /><br />No quiero contento,<br />mi Jesús ausente,<br />que todo es tormento<br />a quien esto siente;<br />sólo me sustente <br />su amor y deseo;<br /><br />Véante mis ojos,<br />dulce Jesús bueno;<br />véante mis ojos,<br />muérame yo luego.<br /><br />Santa TeresaApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-2931474476884917692008-01-21T02:11:00.000+00:002008-01-22T02:36:35.316+00:00Vivo sin vivir en míVivo sin vivir en mí,<br />y tan alta vida espero,<br />que muero porque no muero.<br /><br />Glosa<br /><br />Aquesta divina unión<br />del amor con quien yo vivo,<br />hace a Dios ser mi cautivo<br />y libre mi corazón;<br />mas causa en mí tal pasión<br />ver a mi Dios prisionero,<br />que muero porque no muero.<br /><br />¡Ay que larga es esta vida!<br />¡Qué duros estos destierros,<br />esta cárcel y estos hierros<br />en que el alma está metida!<br />Sólo esperar la salida<br />me causa un dolor tan fiero,<br />que muero porque no muero.<br /><br />¡Ay que vida tan amarga<br />do no se goza el Señor!<br />Y si dulce es el amor,<br />no lo es la esperanza larga;<br />vivo muriendo primero,<br />que muero porque no muero.<br /><br />Vida, ¿qué puedo yo darle <br />a mi Dios que vive en mí,<br />sino esperderte a ti<br />para mejor a Él gozarle?<br />Quiero muriendo alcanzarle<br />pues a Él solo es el que quiero,<br />que muero porque no muero.<br /><br />Estando ausente de ti,<br />¿que vida puedo tener,<br />sino muerte padecer<br />la mayor que nunca vi?<br />Lastima tengo de mí,<br />por ser mi mal tan entero,<br />que muero porque no muero.<br /><br />El pez que del agua sale,<br />aún de alivio no carece;<br />a quien la muerte padece,<br />al fin la muerte le vale;<br />¿qué muerte habrá que se iguale<br />a mi vivir lastimero?<br />que muero porque no muero.<br /><br />Cuando me empiezo a aliviar<br />viéndote en el sacramento,<br />se me hace más sentimiento<br />el no poderte gozar;<br />todo es para pensar<br />por no verte como quiero<br />que muero porque no muero.<br /><br />Mira que el amor es fuerte;<br />vida, no seas molesta;<br />mira que sólo te resta,<br />para ganarte, perderte;<br />venga ya la dulce muerte,<br />venga el morir muy ligero,<br />que muero porque no muero.<br /><br />Aquella vida de arriba<br />es la vida verdadera;<br />hasta que esta vida muera <br />no se goza estando viva;<br />muerte, no me seas esquiva;<br />quíteme Dios esta carga,<br />más pesada que de acero,<br />que muero porque no muero.<br /><br />Cuando me gozo, Señor,<br />con esperanza de verte,<br />viendo que puedo perderte,<br />se me dobla mi dolor;<br />viviendo en tanto pavor<br />y esperando como espero<br />que muero porque no muero.<br /><br />Sácame de aquesta muerte,<br />mi Dios, y dame la vida;<br />no me tengas impedida<br />en este lazo tan fuerte;<br />mira que muero por verte,<br />y vivir sin ti no puedo,<br />que muero porque no muero.<br /><br />Lloraré mi muerte ya<br />y lamentaré mi vida,<br />por tanto que detenida<br />por mis pecados está;<br />¡oh mi Dios! ¿Cuándo será<br />cuando te diga de vero<br />que muero porque no muero?<br /><br /><br /><br /><br /> Vivo sin vivir en mí,<br />y de tal manera espero,*<br />que muero porque no muero.<br /><br /> Vivo ya fuera de mí<br />después que muero de amor; 5<br />porque vivo en el Señor,<br />que me quiso para sí;<br />cuando el corazón le di<br />puse en él este letrero:<br />que muero porque no muero. 10<br /><br /> Esta divina prisión<br />del amor con que yo vivo<br />ha hecho a Dios mi cautivo,<br />y libre mi corazón;<br />y causa en mí tal pasión 15<br />ver a Dios mi prisionero,<br />que muero porque no muero.<br /><br /> ¡Ay, qué larga es esta vida!<br />¡Qué duros estos destierros,<br />esta cárcel, estos hierros 20<br />en que el alma está metida!<br />Sólo esperar la salida<br />me causa dolor tan fiero,<br />que muero porque no muero. <br /><br /> ¡Ay, qué vida tan amarga 25<br />do no se goza el Señor!<br />Porque si es dulce el amor,<br />no lo es la esperanza larga.<br />Quíteme Dios esta carga,<br />más pesada que el acero, 30<br />que muero porque no muero.<br /><br /> Sólo con la confianza<br />vivo de que he de morir,<br />porque muriendo, el vivir<br />me asegura mi esperanza. 35<br />Muerte do el vivir se alcanza,<br />no te tardes, que te espero,<br />que muero porque no muero.<br /><br /> Mira que el amor es fuerte,<br />vida, no me seas molesta; 40<br />mira que sólo te resta,<br />para ganarte, perderte.<br />Venga ya la dulce muerte,<br />el morir venga ligero,<br />que muero porque no muero. 45<br /><br /> Aquella vida de arriba<br />es la vida verdadera;<br />hasta que esta vida muera,<br />no se goza estando viva.<br />Muerte, no me seas esquiva; 50<br />viva muriendo primero,<br />que muero porque no muero.<br /><br /> Vida, ¿qué puedo yo darle<br />a mi Dios, que vive en mí,<br />si no es el perderte a ti 55<br />para mejor a Él gozarle?<br />Quiero muriendo alcanzarle,<br />pues tanto a mi Amado quiero,<br />que muero porque no muero.<br /><br />Santa Teresa de Ávila (1515-1582)Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-9471484664478066112008-01-21T02:09:00.001+00:002008-01-22T02:37:31.759+00:00VI - A un devotoDentro de un santo templo un hombre honrado <br />con grave devoción rezando estaba; <br />sus ojos hechos fuentes enviaba <br />mil suspiros del pecho apasionado. <br /><br /> Después que por gran rato hubo besado 5 <br />las religiosas cuentas que llevaba, <br />con ella el buen hombre se tocaba <br />los ojos, boca, sienes y costado. <br /><br /> Creció la devoción, y pretendiendo <br />besar el suelo al fin, porque creía 10 <br />que mayor humildad en esto encierra, <br /><br /> lugar pide a una vieja; ella volviendo, <br />el «salvo honor» le muestra, y le decía: <br />«Besar aquí, señor, que todo es tierra». <br /><br />Diego Hurtado de MendozaApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-10995628850136432942008-01-21T02:00:00.000+00:002008-01-22T02:39:14.485+00:00Ven, muerte, tan escondidaVen, muerte, tan escondida<br />que no te sienta comigo,<br />porqu’el gozo de contigo<br />no me torne a dar la vida.<br /><br />Ven como rayo que hiere,<br />que hasta que ha herido<br />no se siente su ruido<br />por mejor hirir do quiere.<br /><br />Assí sea tu venida;<br />si no desde aquí me obligo<br />qu’el gozo que havré contigo<br />me dará de nuevo vida.<br /><br />Comendador EscriváApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-19559974462432010432008-01-21T01:49:00.001+00:002008-01-22T02:23:51.264+00:00Romance de la hija del rey de FranciaDe Francia partió la niña, de Francia la bien guarnida, <br />íbase para París, do padre y madre tenía. <br />Errado lleva el camino, errada lleva la guía, <br />arrimárase a un roble por esperar compañía. <br />Vio venir un caballero que a París lleva la guía. <br />La niña, desque lo vido, de esta suerte le decía: <br />—Si te place, caballero, llévesme en tu compañía. <br />—Pláceme, dijo, señora, pláceme, dijo, mi vida. <br />Apeóse del caballo por hacerle cortesía; <br />puso la niña en las ancas y él subiérase en la silla. <br />En el medio del camino de amores la requería. <br />La niña, desque lo oyera, díjole con osadía: <br />—Tate, tate, caballero, no hagáis tal villanía, <br />hija soy de un malato y de una malatía, <br />el hombre que a mi llegase malato se tornaría. <br />El caballero, con temor, palabra no respondía. <br />A la entrada de París la niña se sonreía. <br />—¿De qué vos reís, señora? ¿De qué vos reís, mi vida? <br />—Ríome del caballero y de su gran cobardía: <br />¡tener la niña en el campo y catarle cortesía!<br /><br />Caballero, con vergüenza, estas palabras decía: <br />—Vuelta, vuelta, mi señora, que una cosa se me olvida. <br />La niña, como discreta, dijo: —Yo no volvería, <br />ni persona, aunque volviese, en mi cuerpo tocaría: <br />hija soy del rey de Francia y la reina Constantina, <br />el hombre que a mí llegase muy caro le costaría.Apeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-639953873817547072008-01-21T01:47:00.000+00:002008-01-25T02:04:28.813+00:00Coplas a la muerte de su padreRecuerde el alma dormida,<br />avive el seso y despierte,<br />contemplando<br />cómo se passa la vida,<br />cómo se viene la muerte<br />tan callando;<br />cuán presto se va el plazer,<br />cómo después, de acordado,<br />da dolor;<br />cómo, a nuestro parescer,<br />cualquiera tiempo passado<br />fue mejor.<br /><br />Y pues vemos lo presente<br />cómo en un punto s'es ido<br />y acabado,<br />si juzgamos sabiamente,<br />daremos lo no venido<br />por passado.<br />No se engañe nadie, no,<br />pensando que ha de durar<br />lo que espera,<br />más que duró lo que vio,<br />porque todo ha de passar<br />por tal manera.<br /><br />Nuestras vidas son los ríos<br />que van a dar en la mar<br />que es el morir;<br />allí van los señoríos<br />derechos a se acabar<br />y consumir;<br />allí los ríos caudales,<br />allí los otros, medianos<br />y más chicos,<br />i llegados son iguales<br />los que viven por sus manos<br />y los ricos.<br /><br />Dexo las invocaciones<br />de los famosos poetas<br />y oradores;<br />no curo de sus ficciones,<br />que traen yerbas secretas<br />sus sabores.<br />A Aquél solo me encomiendo,<br />Aquél solo invoco yo,<br />de verdad,<br />que en este mundo viviendo<br />el mundo no conosció<br />su deidad.<br /><br />Este mundo es el camino<br />para el otro, que es morada<br />sin pesar;<br />mas cumple tener buen tino<br />para andar esta jornada<br />sin errar.<br />Partimos cuando nascemos,<br />andamos mientra vivimos,<br />y llegamos<br />al tiempo que fenescemos;<br />assí que, cuando morimos,<br />descansamos.<br /><br />Este mundo bueno fue<br />si bien usáremos dél<br />como debemos,<br />porque, según nuestra fe,<br />es para ganar aquél<br />que atendemos.<br />Y aun el hijo de Dios,<br />para sobirnos al cielo,<br />descendió<br />a nascer acá entre nos<br />y vivir en este suelo<br />do murió.<br /><br />Ved de cuán poco valor<br />son las cosas tras que andamos<br />y corremos,<br />que, en este mundo traidor,<br />aun primero que muramos,<br />las perdemos:<br />dellas deshaze la edad,<br />dellas casos desastrados<br />que acaescen,<br />dellas, por su calidad,<br />en los más altos estados<br />desfallescen.<br /><br />Dezidme, la hermosura,<br />la gentil frescura y tez<br />de la cara,<br />la color y la blancura<br />cuando viene la vejez,<br />¿cuál se para?<br />Las mañas y ligereza<br />y la fuerça corporal<br />de juventud,<br />todo se torna graveza<br />cuando llega al arrabal<br />de senectud.<br /><br />Pues la sangre de los godos,<br />el linaje y la nobleza<br />tan crescida,<br />¡por cuántas vías y modos<br />se sume su gran alteza<br />en esta vida!:<br />Unos, por poco valer,<br />por cuan baxos y abatidos<br />que los tienen;<br />otros que, por no tener,<br />con oficios no debidos<br />se mantienen.<br /><br />Los estados y riqueza<br />que nos dexan a deshora<br />¿quién lo duda?<br />No les pidamos firmeza,<br />pues que son de una señora<br />que se muda;<br />que bienes son de Fortuna<br />que revuelve con su rueda<br />presurosa,<br />la cual no puede ser una,<br />ni estar estable ni queda<br />en una cosa.<br /><br />Pero digo que acompañen<br />y lleguen hasta la huesa<br />con su dueño:<br />por esso no nos engañen,<br />pues se va la vida apriessa<br />como sueño.<br />Y los deleites de acá<br />son, en que nos deleitamos,<br />temporales,<br />y los tormentos de allá,<br />que por ellos esperamos,<br />eternales.<br /><br />Los plazeres y dulçores<br />desta vida trabajada<br />que tenemos,<br />¿qué son sino corredores<br />y la muerte, la celada<br />en que caemos?<br />No mirando a nuestro daño,<br />corremos a rienda suelta<br />sin parar;<br />desque vemos el engaño<br />y queremos dar la vuelta,<br />no hay lugar.<br /><br />Si fuesse en nuestro poder<br />tornar la cara fermosa<br />corporal,<br />como podemos hazer<br />el ánima gloriosa<br />angelical,<br />¡qué diligencia tan viva<br />toviéramos toda hora,<br />y tan presta,<br />en componer la cativa,<br />dexándonos la señora<br />descompuesta!<br /><br />Essos reyes poderosos<br />que vemos por escrituras<br />ya passadas,<br />con casos tristes, llorosos,<br />fueron sus buenas venturas<br />trastornadas.<br />Assí que no hay cosa fuerte,<br />que a papas y emperadores<br />y perlados,<br />assí los trata la muerte<br />como a los pobres pastores<br />de ganados.<br /><br />Dexemos a los troyanos,<br />que sus males no los vimos<br />ni sus glorias;<br />dexemos a los romanos,<br />aunque oímos y leimos<br />sus historias.<br />No curemos de saber<br />lo de aquel siglo passado<br />qué fue d'ello;<br />vengamos a lo de ayer,<br />que también es olvidado<br />como aquello.<br /><br />¿Qué se hizo el rey don Juan?<br />¿Los Infantes de Aragón,<br />qué se hizieron?<br />¿Qué fue de tanto galán?<br />¿Qué fue de tanta invención<br />como truxieron?<br />Las justas y los torneos,<br />paramentos, bordaduras<br />y cimeras,<br />¿fueron sino devaneos?,<br />¿que fueron sino verduras<br />de las eras?<br />¿Qué se hizieron las damas,<br />sus tocados, sus vestidos,<br />sus olores?<br />¿Qué se hizieron las llamas<br />de los fuegos encendidos<br />de amadores?<br /><br />¿Qué se hizo aquel trovar,<br />las músicas acordadas<br />que tañían?<br />¿Qué se hizo aquel dançar,<br />aquellas ropas chapadas<br />que traían?<br />Pues el otro, su heredero,<br />don Enrique, !qué poderes<br />alcançaba!,<br />¡cuán blando, cuán halaguero<br />el mundo con sus plazeres<br />se le daba!<br />Mas veréis, ¡cuán enemigo,<br />cuán contrario, cuán cruel<br />se le mostró!;<br />habiéndole sido amigo,<br />¡cuán poco duró con él<br />lo que le dio!<br /><br />Las dádivas desmedidas,<br />los edificios reales<br />llenos de oro,<br />las vaxillas tan febridas,<br />los enriques y reales<br />del tesoro,<br />los jaezes y caballos<br />de su gente, y atavíos<br />tan sobrados,<br />¿dónde iremos a buscallos?;<br />¿qué fueron, sino rocíos<br />de los prados?<br />Pues su hermano, el inocente<br />que, en su vida, sucessor<br />se llamó,<br />¡qué corte tan excelente<br />tuvo y cuánto gran señor<br />que le siguió!<br /><br />Mas, como fuesse mortal,<br />metióle la muerte luego<br />en su fragua.<br />¡Oh, juïzio divinal!,<br />cuando más ardía el fuego<br />echaste agua.<br />Pues aquel gran Condestable,<br />maestre que conoscimos<br />tan privado,<br />no cumple que dél se hable,<br />sino solo que lo vimos<br />degollado.<br />Sus infinitos tesoros,<br />sus villas y sus lugares,<br />su mandar,<br /><br />¿qué le fueron sino lloros?,<br />¿fuéronle sino pesares<br />al dexar?<br />Pues los otros dos hermanos,<br />maestres tan prosperados<br />como reyes,<br />que a los grandes y medianos<br />truxeron tan sojuzgados<br />a sus leyes;<br />aquella prosperidad<br />que tan alto fue subida<br />y ensalzada,<br />¿qué fue sino claridad<br />que, estando más encendida,<br />fue amatada?<br />Tantos duques excelentes,<br />tantos marqueses y condes,<br />y barones<br />como vimos tan potentes,<br />di, Muerte, ¿dó los escondes<br />y traspones?<br /><br />Y las sus claras hazañas<br />que hizieron en las guerras<br />y en las pazes,<br />cuando tú, cruda, te ensañas,<br />con tu fuerça las atierras<br />y deshazes.<br />Las huestes innumerables,<br />los pendones y estandartes<br />y banderas,<br />los castillos impugnables,<br />los muros y baluartes<br />y barreras,<br />la cava honda, chapada,<br />o cualquier otro reparo<br />¿qué aprovecha?<br /><br />Que si tú vienes airada,<br />todo lo passas de claro<br />con tu flecha.<br />Aquel, de buenos abrigo,<br />amado por virtuoso<br />de la gente,<br />el maestre don Rodrigo<br />Manrique, tan famoso<br />y tan valiente;<br />sus grandes hechos y claros<br />no cumple que los alabe,<br />pues los vieron,<br />ni los quiero hazer caros,<br />pues el mundo todo sabe<br />cuales fueron.<br /><br />¡Qué amigo de sus amigos!<br />¡Qué señor para criados<br />y parientes!<br />¡Qué enemigo de enemigos!<br />¡Qué maestro de esforçados<br />y valientes!<br />¡Qué seso para discretos!<br />¡Qué gracia para donosos!<br />¡Qué razón!<br />¡Qué benigno a los sujetos,<br />y a los bravos y dañosos,<br />un león!<br /><br />En ventura, Octavïano;<br />Julio César, en vencer<br />y batallar;<br />en la virtud, Africano;<br />Aníbal, en el saber<br />y trabajar;<br />en la bondad, un Trajano;<br />Tito, en liberalidad<br />con alegría;<br />en su braço, Aurelïano;<br />Marco Atilio, en la verdad<br />que prometía.<br />Antonio Pío, en clemencia;<br />Marco Aurelio, en igualdad<br />del semblante;<br />Adrïano, en elocuencia;<br />Teodosio, en humanidad<br />y buen talante;<br />Aurelio Alexandre fue<br />en disciplina y rigor<br />de la guerra;<br />un Costantino, en la fe;<br />Camilo, en el gran amor<br />de su tierra.<br /><br />No dexó grandes tesoros,<br />ni alcançó grandes riquezas<br />ni vaxillas,<br />mas hizo guerra a los moros<br />ganando sus fortalezas<br />y sus villas.<br />Y en las lides que venció,<br />muchos moros y caballos<br />se perdieron,<br />y en este oficio ganó<br />las rentas y los vasallos<br />que le dieron.<br /><br />Pues por su honra y estado,<br />en otros tiempos passados,<br />¿cómo se hubo?:<br />Quedando desamparado,<br />con hermanos y criados<br />se sostuvo.<br />Después que hechos famosos<br />hizo en esta dicha guerra<br />que hazía,<br />hizo tratos tan honrosos<br />que le dieron aun más tierra<br />que tenía.<br /><br />Estas sus viejas estorias<br />que con su braço pintó<br />en la joventud,<br />con otras nuevas victorias<br />agora las renovó<br />en la senectud.<br />Por su gran habilidad,<br />por méritos y ancianía<br />bien gastada,<br />alcançó la dignidad<br />de la gran caballería<br />de la Espada.<br /><br />Y sus villas y sus tierras,<br />ocupadas de tiranos<br />las halló,<br />mas por cercos y por guerras,<br />y por fuerça de sus manos<br />las cobró.<br />Pues nuestro Rey natural,<br />si de las obras que obró<br />fue servido,<br />dígalo el de Portugal,<br />y en Castilla quien siguió<br />su partido.<br /><br />Después de puesta la vida<br />tantas vezes por su ley<br />al tablero,<br />después de tan bien servida<br />la corona de su Rey<br />verdadero,<br />después de tanta hazaña<br />a que no puede bastar<br />cuenta cierta,<br />en la su villa de Ocaña<br />vino la Muerte a llamar<br />a su puerta.<br /><br />Diziendo: "Buen caballero,<br />dexad el mundo engañoso<br />y su halago,<br />vuestro coraçón de azero<br />muestre su esfuerço famoso<br />en este trago;<br />y pues de vida y salud<br />hezistes tan poca cuenta<br />por la fama,<br />esforçad vuestra virtud<br />para sofrir esta afruenta<br />que os llama.<br /><br />"No se os haga tan amarga<br />la batalla temerosa<br />que esperáis,<br />pues otra vida más larga<br />de fama tan glorïosa<br />acá dexáis.<br />Aunque esta vida de honor<br />tampoco no es eternal<br />ni verdadera,<br />mas con todo es muy mejor<br />que la otra temporal,<br />perescedera.<br /><br />"EI vivir que es perdurable<br />no se gana con estados<br />mundanales,<br />ni con vida deleitable<br />en que moran los pecados<br />infernales.<br />Mas los buenos religiosos<br />gánanlo con oraciones<br />y con lloros;<br />los caballeros famosos,<br />con trabajos y aflicciones<br />contra moros.<br /><br />"Y pues vos, claro varón,<br />tanta sangre derramastes<br />de paganos,<br />esperad el galardón<br />que en este mundo ganastes<br />por las manos;<br />y con esta confiança,<br />y con la fe tan entera<br />que tenéis,<br />partid con buena esperança,<br />que esta otra vida tercera<br />ganaréis".<br /><br />Responde el Maestre<br />"No gastemos tiempo ya<br />en esta vida mezquina<br />por tal modo,<br />que mi voluntad está<br />conforme con la divina<br />para todo;<br />y consiento en mi morir<br />con voluntad plazentera,<br />clara y pura,<br />que querer hombre vivir,<br />cuando Dios quiere que muera,<br />es locura."<br /><br />Oración<br />"Tu, que por nuestra maldad<br />tomaste forma servil<br />y baxo nombre;<br />Tú, que a tu divinidad<br />juntaste cosa tan vil<br />como el hombre;<br />Tú, que tan grandes tormentos<br />sufriste sin resistencia<br />en tu persona;<br />no por mis merescimientos,<br />mas por tu sola clemencia,<br />me perdona."<br /><br />Cabo<br />Así, con tal entender,<br />todos sentidos humanos<br />conservados,<br />cercado de su mujer,<br />y de hijos, y hermanos,<br />y criados,<br />dio el alma a quien gela dio,<br />ei cual la ponga en el cielo<br />en su gloria.<br />Y aunque la vida murió,<br />nos dexó harto consuelo<br />su memoria.<br /><br /> Jorge ManriqueApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-4305979621546619850.post-18999624165114694142008-01-21T01:43:00.000+00:002008-01-25T03:31:20.470+00:00El cántico del esclavo (fragmento)Cautivo mísero <br />gimo humillado. <br />Ni aun tristes súplicas <br />puedo exhalar. <br /><br />Un amo rígido <br />por cualquier culpa <br />mi sangre y lágrimas <br />hace brotar. <br /><br />¡Maldición sobre el fiero homicida <br />que el primero humilló a sus iguales! <br />¡Maldición sobre aquellos mortales <br />que cual dioses pretenden mandar! <br /><br />¿Quién al hombre le ha dado derecho <br />de vender y comprar a los hombres, <br />y, entregando al oprobio sus nombres, <br />con la infamia su frente sellar? <br /><br />Amo injusto, mi espalda desnuda <br />tú con vara de hierro golpeas <br />y en mi amarga aflicción te recreas, <br />desoyendo mi trémula voz. <br /><br />¿Corre acaso otra sangre en mis venas? <br />¿Soy de especie distinta y natura? <br />¡Es la imagen de Dios, es su hechura <br />la que ultrajas!, ¡oh dueño feroz! <br />[...] <br />Ved al hombre que libre se llama <br />cómo eleva a los cielos la frente; <br />cómo el digno entusiasmo que siente <br />se refleja en su voz varonil. <br /><br />Al mirarle de cólera ardiendo <br />y entre envidia luchando y enojos, <br />me parece que insultan sus ojos <br />a mi estado abatido y servil. <br /><br />Oigo al punto una voz que me grita: <br />«Eres hombre, eres libre, eres fuerte, <br />y a quien nunca temor dio la muerte, <br />nunca, nunca en cadenas gimió. <br /><br />No hay ninguno que deba oprimirnos <br />aunque ocupe el dosel de los reyes. <br />Para hacernos esclavos no hay leyes; <br />libres Dios a los hombres creó». <br /><br />Fuego volcánico <br />mi pecho inflama; <br />ya no soy tímido, <br />soy un león. <br /><br />Dueño tiránico, <br />libertad dame, <br />o rompo, ¡oh pérfido!, <br />tu corazón.<br /><br />Fernando CorradiApeleshttp://www.blogger.com/profile/06190718504296901143noreply@blogger.com0